Desapego y renuncia.
Tomo como inspiración el capítulo: Comprender el desapego y la renuncia del libro de Omar “Camino al minimalismo”.
“La libertad total viene acompañada de dos conceptos que debemos hacer nuestros y aceptarlos como parte fundamental de una vida mejor: el desapego y la renuncia.”
Este aspecto del minimalismo no es muy bien entendido por las personas que no son minimalistas, pues entienden que desapego es dejadez o puede caer en ella.
Creo que no lo entienden porque no han visualizado que han caído en la trampa del consumismo, y todo lo que signifique desapego a lo material o la renuncia a algo es dejadez…
Define Omar el desapego como una actitud personal por la que aceptamos el hecho de que podemos romper los vínculos emocionales y personales (…)
Me parece importante este aspecto: aceptamos el hecho de que podemos…
Poder es querer se dice…
Yo quiero ser libre, para lo que tengo que renunciar o tener desapego a lo que me esclaviza.
Dice Omar: “La renuncia por su parte es la capacidad que vamos creando para dejar ir las cosas que no necesitamos, cuando renuncias a algo te sientes más ligero, sin culpa y sin pesadez.”
Toda renuncia o desapego a algo cuesta mucho (recordad el que pueda, lo que le cuesta a un bebé renunciar al mamar del pecho materno).
La renuncia o desapego de un fumador empedernido, de un adicto a la bebida es algo de un esfuerzo hercúleo y que tenemos que aceptar que podemos.
Incluso hoy en día hay movimientos sociales que han renunciado al sexo…
¿Qué efectos secundarios tendrá esta renuncia sobre la demografía?
Nadie dice que será fácil y suave, es costoso y difícil el superar las trampas sociales, pero se puede.
Una cosa que estoy ya realizando es que cuando implemento alguna actividad, hago lo mismo que cuando voy a instalar un programa informático nuevo: Miro la incompatibilidad y el espacio que ocupa en mi disco duro.
Ahora, en estas fechas, nos vamos a enfrentar a unos constantes retos y provocaciones a nuestro modo de vida minimalista, me refiero a los regalos y festejos de Navidad, Reyes y fin de año…
Si regalamos numerosos objetos, estaremos entrando en un territorio ajeno y denostado por nuestra filosofía minimalista…
Si nos regalan en correspondencia cosas… nos estarán creando un problema…
¿Cómo enfrentar esto?
Claro que podemos hacer ver a los demás que no necesitamos cosas…
Pero el resultado es que nos va a parecer que estamos haciendo el necio, pues gastamos dineros en regalos inapropiados a otros de otra “filosofía” y los consumistas se ahorran su dinero en nosotros…
Quizás podemos decirles que nos regalen el valor en dinero, y posteriormente donarlo, o no decirles nada y donarlo todo nosotros a gente sin recursos… (Claro que cuando se enteren se van a enfadar bastante, pues parece que el aceptar regalos lleva implícito el arrastrar con ellos toda nuestra vida).
En mucha gente el rechazo a los regalos es considerado una ofensa.
Ya reflexioné sobre el fenómeno de la tradicional Lotería de Navidad en el post Miedo a la lotería…
“Cuando en un alarde de hartazgo del sistema, me rebelé contra él, decidiendo no caer en esa tentación que considero supersticiosa de comprar lotería por si toca… solo invierto en lotería como una alternativa que le doy al destino para que me favorezca si lo tiene menester… fui tomado por un excéntrico por el departamento entero, cuando se corrió la voz de que no llevaba lotería, me odiaron.”
De cómo tuve que tomar una acción para evitar este odio lo comento en la entrada… Quizás tenga que idear algo similar con esto de los regalos de Tradición Navideña…
Estoy pensando como alternativa una suscripción al libro de Omar Carreño: Camino al minimalismo.
Contactar con el autor del blog La Tribuna de Ávalon
Por medio de este correo puedes comunicarme todo lo que deseéis: asamblea.reflexion@gmail.com
Entradas populares de este blog
Me contaron una historia el otro día, me gustó el mensaje pedagógico que contenía, os lo cuento ahora: Es protagonista de esta historia, un padre y marido, pero podría ser una madre y esposa que también está muy ocupada, e incluso una familia monoparental (de la que ya van existiendo demasiadas). Un hijo (igualmente podía ser una chiquilla, que para el caso es igual) iba ha realizar su primera comunión, el padre no pudo asistir, lo mismo que veces anteriores tampoco pudo asistir a eventos importantes para su hijo, siempre se excusaba porque tenía que trabajar ese día o momento. Realmente era una persona muy ocupada, no era otro el motivo en este caso. Un día, nuestro chiquillo se interesó por la cantidad que ganaba su padre en una hora, se lo preguntó a la hora de acostarse, el padre creyó que era un trabajo del colegio y le contestó que ganaba 40 € a la hora. En sucesivos días, nuestro protagonista infantil, logró ahorrar de sus “pagas” y de algo de dinero que pid
Pensar es el trabajo más difícil que existe. Quizá sea esa la razón por la que haya tan pocas personas que lo practiquen. Henry Ford Pensar es un hábito principalmente, la sociedad tiende a darte todo "pensado" y sólo te facilita la dispersión. Yo creo que todo se debe a una estrategia dolosa para entontecer a la población a la que nos tratan la mayoría de las veces como menores de edad, te hacen creer que solo debes ocuparte de tu gozo y dejarles a ellos el trabajo de pensar. Pensar por uno mismo es lo más revolucionario que puedes hacer. Haz lo que puedas, con lo que tengas, donde estés. Theodore Roosevelt Vale para cualquier situación. Existen dos formas de pensar ante un mismo problema: ¿qué puedo hacer con lo que tengo para solucionarlo? o ¿Dónde tengo que ir para buscar una solución? Es mejor hacer algo con lo que dispongas que además es más satisfactorio; puede quedar menos bonito, pero lo has hecho tú. La vida es lo que ocurre mientras estamos ocupados
Es muy importante conocer las motivaciones, las propias y las ajenas. Conociendo la motivación veremos cuales son las líneas rojas que no pasarán , es decir por lo que están dispuestos a aguantar todo o casi todo. El vecino de al lado. Generalmente depende de una entrada de dinero para mantenerse en ese nivel de confort, -que suele venir de un salario-. Puede depender del presupuesto público -con lo que posiblemente es funcionario o asociado a una institución, ya sea por subvención o por trabajo contratado con alguna administración - con lo que podemos aventurarnos a pensar que no tendrá comportamientos anti sistema. Generalmente es común a todos el interés pecuniario, y el temor a perderlo es un acicate muy poderoso. Con ser muy importante no es el único, está la reputación social que es algo que unos llaman “honor” y otros “importancia social, fama, Vip, y mil nombres más, pero que todos inciden en la autoestima y el ego. U N TRABAJADOR POR CUENTA AJENA Son los más numerosos, más
Comentarios
Publicar un comentario