Metamorfosis de un humano
Enredado
ando en el tema de la productividad, el minimalismo en todas sus vertientes…
El
animal que era antes, está eclosionando desde la metamorfosis sufrida por causa
de la ruina económica fundamentalmente, que fue el catalizador de todo el
proceso, lo mismo que le ocurre al mundo que ya nunca va ser el mismo…
El
virus del consumismo que me contagió unas enormes ganas de poseer cosas que ni
tenia tiempo de procesar.
Leo
en el blog de mi amigo Omar http://analisisrealista.com/2011/11/18/mis-aplicaciones-para-el-ipad/
Y
me volvieron antiguas sensaciones de consumo, por suerte ese “mono” ya lo tengo
dominado y me aguanté el ansia de poseer un artilugio tan atractivo y con tantas
aplicaciones interesantes… pero que realmente no preciso para nada.
Mi
metamorfosis está dando un nuevo animal: minimalista, productivo y sobre todo
un fenómeno insólito en mí, retro y más lento y pausado.
Estoy
rescatando con mucho trabajo modos y costumbres que resultan anacrónicas en el
siglo XXI, he intentado retomar mi primer y sencillo teléfono móvil, pero no ha
sido posible, pues la red no admite esa tecnología…
Todo
te lleva en volandas hacia una sociedad tecnológicamente dirigida, y resulta muy
difícil el escapar, de ahí que mi metamorfosis resulte revolucionaria, me llega
por twitter una noticia: “Los libros electrónicos Kindle de Amazon sufren los
escáneres de los aeropuertos”. Esta noticia corrobora lo que cuento, somos
prisioneros con sensación de libertad.
Desde
mi nuevo cuerpo nacido de la metamorfosis, pretendo tener las mínimas cadenas,
comienzo con desaprender lo aprendido que eran cosas y roles equivocados,
aprenderé sobre la marcha ayudado de mi experiencia, auxiliado por mi
intuición, puesto que mi parte lógica me la han contaminado con enseñanzas
erróneas, pues lo que fue mi etapa de educación y formación, era en realidad
una etapa de doma y adoctrinamiento.
Libre
experimentaré la sensación de desnudez de cosas inútiles que ocupan sitio y
generan gastos, adicción y control sobre mi vida y felicidad, seré feliz siendo
yo mismo a mi manera no a la manera que me dijeron que sería feliz…
Sentiré
el aire fresco correr por mi cuerpo desnudo de cosas superfluas.
Me
sentiré abrigado por los nuevos conocimientos adquiridos y con los corroborados
por mi experiencia.
Tendré
tiempo para lo que considere, pues ninguna agenda me marcará las tareas.
Practicaré
a menudo el desapego a cosas y personas que me esclavizan... una desafección
amorosa y medida, humana y empática, pero desafección liberadora, pues nadie
puede vivir tu vida ni tu puedes vivir la de otra persona.
Y
si me equivoco…tampoco tendrá importancia, soy humano y errar es de humanos.
De
todas formas la vida es finita y es una estupidez desperdiciarla en tareas
tediosas que te marcan desde fuera, que se seguirán haciendo por otras víctimas
y que nadie se acordará de que tú las hacías…
Como
decimos en el 15M, dormíamos y hemos despertado… y ya nada será igual.
Consumir
responsable, sí, pero responsable contigo mismo lo primero…
Desde
hace tiempo ya, rechazo regalos de objetos (esas pequeñas cosas sin valor
pecuniario, solo valiosas para el regalador y que a ti solo te ocupa lugar y te
condena a soportar su presencia no solicitada para no agraviar al regalador…
Si
me quieren regalar algo, que sea presencial, es decir una comida juntos, unas
horas de charla y café si se prefiere o simplemente un paseo por el parque, lo
demás es ganas de fastidiar…
Wow!!! Muy interesante reflexión. Soy un ser humano que al igual que tu esta teniendo su propia metamorfosis...
ResponderEliminarSaludos...
Atte:
Adrián mgx
Gracias por aportar tu aliento de humano en metamorfosis...
ResponderEliminarUn abrazo fraternal.
Avalon