Gestionando nuestra vida.
Compañeros han apuntado
reglas de productividad, otros recuperar el auténtico descanso semanal etcétera…
Todos con el propósito de
luchar contra el estrés, ese pérfido factor que nos amarga la vida cuando no,
nos la quita…
Bien, mi propuesta es
absolutamente simple:
Eliminación del calendario como norma de obligado
cumplimiento.
Eliminando el calendario de
nuestras vidas, solo tendremos tareas.
·
Tarea de producir
(lo que produzcamos).
·
Tarea de ocio.
·
Tarea de
disipación.
Pero ya sin estar sujeto al
calendario; naturalmente que no me refiero al imposible destierro del
calendario al que estamos sujetos por imperativo legal o laboral…
Desde que adopté nuevas
formas de vivir, he comprobado que me va mejor que antes, hago lo que tengo que
hacer cuando me da la gana salvo que me venga impuesto por imperativo legal.
Ya el lunes no es el
primer día de trabajo, ni el viernes el último, ni los fines de semana son
el viernes, sábado y domingo…
Lo que tenga que hacer lo
hago cuando es menester y puedo…
El calendario solo es un
instrumento como la agenda, de coordinarme con los demás, lo mismo que el
reloj, que lo uso para coordinarme con el medio.
Realmente si hay un primer
día de algo como por ejemplo es el lunes que le decimos "el primer día laboral",
habrá por lo tanto el síndrome del lunes…
Llevemos a cabo la tarea de producir con el orden
y el ritmo adecuado a la calidad que
queremos…
Lo mismo para la tarea del
ocio, que será a nuestra satisfacción.
La disipación será más anárquica
y terapéutica…
Del mismo modo que usamos
para coordinarnos los usos horarios mundiales, del mismo modo que tenemos en
cuenta las fiestas locales; haremos un uso solo como medio de coordinación del
calendario semanal.
La flexibilidad será nuestra
novedad: Enfrentaremos nuestras tareas cuando convenga.
Las tareas las haré todas con
el mismo impulso y resolución, eliminando toda imposición.
El trabajar contra corriente
tiene muchas ventajas, pues si trabajas cuando otros descansan, no serás
interrumpido en las tareas que necesiten mucha concentración.
Al salirte del “calendario
semanal” de los “ladrones de tiempo” les estás haciendo más difícil el que te
roben tiempo, pues te lo roban por coincidir con su “tiempo” que tratan de
optimizar a tu costa.
Reflexionemos la frase que
hemos escuchado o dicho muchas veces: “Es que hace lo que le da la gana” la mayoría de las veces esconde una envidia
por nuestra parte, más que un crítica…
La realidad es que gestiona
de manera personalizada sus tareas, y no están estandarizadas por el calendario
común.
Resumen de mi propuesta:
·
Eliminemos de
nuestra gestión personal la idea del calendario semanal, manteniéndolo solo
como medio de coordinarnos con los demás.
·
Eliminemos las
obligaciones y cambiémoslas por tareas a realizar de la mejor y más
satisfactoria forma posible de hacerlas.
Si lo conseguimos,
obtendremos la desaparición de los síndromes del “lunes”.
En cuanto te lo permitan las circunstancias... es cierto que si haces lo que te apetece lo harás en general bastante bien. Un saludo.
ResponderEliminar