A pagar toca.

 La realidad actual nos da un ejemplo de lo que significa mi lema minimalista: “ No necesites lo que te puedan quitar ni codicies lo que no puedes tener.

Hoy es noticia que una plataforma digital cobrará por subir fotos:

Algunas personas ven en esta iniciativa un problema, yo solo veo una consecuencia lógica.

Quisiera hacer unas precisiones al respecto:

¿Realmente qué se buscaba con subir a la nube nuestras fotos (con la pérdida de intimidad que ello conlleva)?

La comodidad que era el tener un servidor gratis a nuestro servicio, evitando el tener que comprar nosotros un dispositivo de almacenamiento (que siempre se puede estropear).

La auténtica realidad es que logramos tener una enorme cantidad de fotografías y vídeos que suponen en sí mismos un problema de gestión y almacenamiento.

Yo, que soy muy austero en todo, he llegado a tener una cantidad excesiva, ¡Que no tendrá una persona normal! 

Dispongo (además de la nube como copia de seguridad) de un disco duro externo y 5 pendrives, pero la gente que conozco habla de discos duros (así en plural) de varios terabytes.

La gestión de ellas, para conocer de que dispongo, me lleva a tener realizar un archivo Excel donde las etiquetaré, pues ahora si quiero buscar una que guardo en la memoria me tengo que revisar miles de ellas.

Dentro de poco Google y otros que se sumarán nos pondrán en la tesitura de pagar o bajárnoslas a un HDD propio, y ahí veremos nuestra decisión que será determinante.

Yo ya tomé la decisión en el inmediato pasado con G+ cuando tuve que decidir “dejarlas morir” en el ciberespacio o bajarme los datos, prescindí de ellos, pero no creo que haga lo mismo con las fotos.

Nuestras fotos son “normalitas” hechas por un periférico automático, de calidad, pero no se les puede comparar con las antiguas fotos de placa o cliché, que se las trataba en un laboratorio, esas eran el producto de la ciencia del fotógrafo, éstas son el producto del periférico, por lo que sólo interesarán al sujeto que las hizo o aparece en ellas, pero no creo que trasciendan. 

Desde luego yo no creo que las mías interesen a nadie, y ni siquiera sé si mis escritos (en los cuales pongo mi corazón) interesen en el futuro, por lo que estos correrán la misma suerte que las fotos.

Vuelvo al tema que motiva mi reflexión, si puedes pagar, paga. Si no no te preocupes, y si puedes pagarte un HDD, ya sabes lo que toca, piensa que te servirá para visualizarlas de nuevo, y seguro que algunas te traerán recuerdos de nuevo ya olvidados.

Y ya sabes: No necesites lo que te puedan quitar, porque te lo quitarán tarde o temprano y eso duele si estás atado a ello.