¿Necesitas ponerte retos?
Un amigo, o mejor dicho,
varios amigos y amigas, están metidos en la faena de imponerse retos, como
forma de probarse a sí mismos, de mejorar su forma física vital, de ser más
felices y estar mejor con ellos mismos.
Nada que objetar, pero
indica (de lo que me alegro) que disponen de una vida llana sin apenas obstáculos,
y algo (a su parecer) falto de “vértigo”.
Si tú no necesitas
ponerte retos, pues la vida te ha llenado de retos y vallas que te obstaculizan
el paso, esto es para ti.
Las dietas son para los
que las necesitan, ningún hambriento precisa una dieta para adelgazar, lo mismo
que ninguna persona necesitada necesita retos de minimalismo.
Lo que necesitas es
conocer las técnicas de saltar obstáculos y el arte de esquivar vallas y la
forma de alcanzar la meta.
¿Quién te puede enseñar
todo eso?
Nadie, salvo tu
experiencia.
No hay nadie, ni ningún
libro de autoayuda que lo consiga, solo tu propia reflexión, y tu propia
experimentación.
Solo puedes consultar en
libros y sitios web: señales, indicios, experiencias ajenas, todas ellas
compartidas por los protagonistas (que deberás seleccionar sin son experiencias
propias, por lo tanto contrastadas al menos por el que lo cuenta, o son meros
relatos para quedar bien y presumir ante quien sea, pues no olvides aquello tan
español del refranero: “Consejos doy, pero para mí no tengo”).
¿Qué te puedo contar yo?
Solo mi propia
experiencia, contrastada ya por 10 años de práctica.
Lo hago a través de mis
escritos, casi todo con la etiqueta acción
minimalista (7)economía desde el minimalismo (4)minimalismo (60) reflexiones
minimalistas (13)
Pero te confieso una verdad, cuando lo he
explicado, o he intentado que otras personas necesitadas, sigan mis “experiencias”
he fracasado.
¿A que atribuyo este fracaso?
Pues se los he preguntado, y me
contestaron que es que no tenían la voluntad de hacerlo, que estaban demasiado
abrumados y no se sentían capaces de ello.
Con lo que saco la conclusión de que lo
primero que se destruye es la auto estima, sin ella le falta la fuerza vital.
Te sientes una mierda, el sistema te
descarta y todo tu mundo se va al mismo sitio como te sientes.
Cada uno de nosotros somos únicos, NO
somos iguales, somos un prototipo solo parecido a otros, pero únicos, con lo
que no valen las reglas generales de muchos “iguales” para ti, tú necesitas tú
regla.
Decía Mary Tyler Moore “ La
adversidad alimenta el valor” y llevaba razón, los que la vida les ha puesto un
camino llano, tienen que buscarse los retos, pero algunos millones de nosotros
no.
Con mi
carácter forjado en multitud de adversidades, he tenido el valor suficiente
para encarar las dificultades, pero eso no les vale a todos, pero sí puede
valerles las experiencias y el cómo las afronté, de ahí mi ahínco de compartirlas,
en al esperanza de que a alguien le valga.
Capítulo
aparte merece mi experiencia en este último periodo de mi vida, donde he
encontrado lo que echaba en falta de manera inconsciente, lo que completa la
fuerza y el vigor que precisaba, pues la vida no deja de ponerme obstáculos y
situaciones muy comprometidas, y me está ayudando de una forma que ni
sospechaba.
Podéis
ver la evolución que menciono, también lo cuento, bajo las etiquetas fe de vida (20).
En
esta nueva etapa, han caído todos los velos, que a modo de falsos escenarios,
me engañaban y me hacían sentir que vivía en otro mundo. Al caer, entró la luz,
y vi más claramente los caminos, los equívocos, los erróneos y el recto, lo demás
es seguir el camino que elijas, pero de ello dependerá tu destino, ya serán tus
decisiones y no la de otros.
De ti depende
todo, eres libre, y recuerda que hay Alguien que te ama y no te ha descartado,
no valora nada más que tu corazón, mira en él y sigue lo que te diga.
Me gusta Alberto, en mi caso particular si que he tenido que superar varios obstaculos a través de mi vida y es ahora cuando me estoy dando cuenta que algunos de esas "vallas" que tuve que saltar tal vez lo hice por seguir unos objetivos que no me conducían a la felicidad. Hoy quiero corregir ese camino y avanzar hacia una vida más simple.
ResponderEliminarMuchas gracias por aportar tu experiencia, tengo muy claro que hay que desear poco y esperar todavía menos, para sentirse mejor.
EliminarUn abrazo